El tratamiento de las quemaduras requiere, por parte del profesional, un cuidado reconstructivo de la zona afectada. Dada la complejidad de este tipo de afecciones es imprescindible evaluar los tratamientos posibles, desde los cuidados reconstructivos epidérmicos hasta la realización injertos.
Las quemaduras requieren un cuidado especial por parte del médico que no solo debe tener en cuenta el tratamiento específico de sus secuelas. Al estar asociado habitualmente a situaciones traumáticas, los procedimientos y seguimiento del paciente son decisivos respecto a la recuperación.